Dale un toque especial a tu Veganuary con este plato vegano: una salsa cremosa de champiñones y pimienta se combina con unos sabrosos fusilli integrales de espelta para ofrecerte una experiencia de sabor completa, sin renunciar a nada.
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Paso 1/6
Prepara las albóndigas veganas según las instrucciones del paquete y mantenlas calientes.
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Paso 2/6
Cuece la pasta hasta que esté al dente. Para el topping, corta la cebolla roja en finos aros y colócalos en un bol; vierte agua hirviendo y añade el vinagre. Déjalos reposar entre 5 y 10 minutos y, a continuación, escurre la mezcla.
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Paso 3/6
Corta los champiñones en láminas y pica finamente la cebolla. En una sartén, fríe sin aceite unas cuantas láminas de champiñón (aproximadamente un puñado) hasta que estén doradas; añade un poco de aceite y continúa friendo durante 1 minuto. Resérvalos.
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Paso 4/6
Sofríe la cebolla hasta que esté traslúcida, luego añade los champiñones y saltéalos hasta que se doren.
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Paso 5/6
Añade el caldo de verduras y deja que se reduzca ligeramente. A continuación, incorpora la nata vegana, la pimienta encurtida y la mostaza, mezclando también la mitad del perejil picado.
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Paso 6/6
Sirve las albóndigas veganas junto con la pasta y la salsa cremosa de champiñones en los platos. Decora con el resto del perejil, los champiñones reservados y los aros de cebolla encurtidos.