Un tarro lleno de sabores otoñales: mezcla moras, arándanos y fresas silvestres con gelificante y un chorrito de limón para crear una mermelada vibrante. Perfecta para regalo gastronómico o para dar alegría a tus desayunos.
-
Paso 1/8
Selecciona las bayas: usa solo frutas maduras y sin magulladuras para un sabor óptimo.
-
Paso 2/8
Lava las bayas con cuidado y escúrrelas bien.
-
Paso 3/8
Esteriliza el tarro: enjuágalo con abundante agua hirviendo y déjalo secar boca abajo.
-
Paso 4/8
En una cazuela pequeña, combina las bayas, el azúcar de gelificar y el zumo de limón; remueve hasta integrar.
-
Paso 5/8
Calienta a fuego medio y deja cocer durante 3–5 minutos, removiendo de vez en cuando. La mezcla irá espesando.
-
Paso 6/8
Vierte la mermelada caliente en el tarro esterilizado, dejando un dedo de espacio en el borde.
-
Paso 7/8
Cierra la tapa con firmeza (usa agarraderas para no quemarte) y coloca el tarro boca abajo hasta que se enfríe para que selle al vacío.
-
Paso 8/8
Una vez frío, comprueba que la tapa esté hundida hacia dentro; tu mermelada casera ya está lista para almacenar y disfrutar.