Cuando apetece un plato reconfortante, este puré de calabaza otoñal reúne todo el sabor de la temporada. Con un punto de nuez moscada, y aligerado con bebida vegetal, resulta ideal como entrante o guarnición.
1 cda(s). | aceite de oliva |
1 cdta. | nuez moscada |
1 unidad(es) | calabaza (hokkaido, por ejemplo) |
1 pizca | sal |
1 pizca | pimienta |
2 cda(s). | pipas de calabaza |
2 cda(s). | aceite de semillas de calabaza |
-
Paso 1/6
Lava la calabaza, pártela a la mitad, retira las semillas y córtala en láminas.
-
Paso 2/6
Pincela las láminas con el aceite de oliva.
-
Paso 3/6
Sala, añade un toque de pimienta y espolvorea la nuez moscada.
-
Paso 4/6
Coloca las láminas sobre una bandeja forrada con papel de horno y asa a 200 °C con ventilador hasta que estén tiernas (unos 20 min).
-
Paso 5/6
Retira la bandeja, pasa la calabaza a un bol y tritura con una batidora o un pasapurés. Incorpora el aceite de semillas de calabaza y mezcla bien.
-
Paso 6/6
Sirve el puré decorado con las pipas de calabaza para aportar un punto crujiente.